Nuestras sandalias transparentes son monísimas, lo sabemos. Pero también sabemos vuestras preocupaciones: ¿Hacen rozaduras estas cangrejeras transparentes? ¿Cómo puedo evitar el roce de las sandalias? Y además queremos que estés divin@ para lucir tus piececitos con nuestras sandalias cangrejeras. 🙂
Si tu dedo gordo descansa sobre una piel dura y encallecida y tus talones son como una lija, igual ha llegado el momento de coger boli y papel y probar alguno de nuestros consejos. Ya no porque te vayas a poner nuestras sandalias para andar por las rocas, sino por salud.
UN VISTAZO RÁPIDO
Estos trucos te van a salvar la vida para que no tengas rozadoras. Evitaremos esos dolorosos e incómodos dolores. Sabemos que “te has dejado ir” en invierno porque con el calzado cerrado y los calcetines nos olvidamos que tenemos pies, pero el verano está a la vuelta de la esquina y tenemos que ponernos las pilas.
Te vamos a dar unos trucos que es ideal que los hagas antes de ponerte las sandalias, antes de que llegue el verano… Y en general son tratamientos que son muy fáciles y que te van a servir en general para tener unos pies estupendos. ¡Hay que cuidarse!
Es muy importante que te compres la talla exacta y la sandalia encaje perfectamente y que no te quede ni floja ni demasiado prieta. Por ejemplo nuestras sandalias tienen un tallaje más bien grande. Es decir, si normalmente tienes una talla 38 es muy probable que te queden un pelín grandes, pero yo personalmente prefiero que me queden un pelín grandes (las veo más cómodas).
De todas formas lo que te aconsejamos es que te midas el pie con un metro y luego te leas este artículo donde te decimos exactamente qué talla tienes que comprarte de nuestras sandalias transparentes.
Muchas celebrities compran sus sandalias una talla más grande de lo normal. De esta manera tienen espacio en las sandalias para cuando el calor y el estar mucho tiempo paradas les hinchan los pies. Así evitan las ampollas y rozaduras de los zapatos previniendo el problema de las sandalias apretadas en primer lugar.
Ya sabes que a nosotros nos encantan las cangrejeras con calcetines. ¡Lo vemos de los más cool! Pero además es que ponerte los calcetienes con las sandalias transparentes te ayudarán a ensancharlas y amoldarlas a tus pies. Todo ventajas.
Si no eres tan atrevida como ponerte las sandalias con calcetines, también puedes usar pinkies ya que hay un montón de tipos. Los hay para cubrir dedos y talones, sólo dedos, la zona de las almohadillas de la planta… Aunque como nuestras sandalias son transparentes te aconsejamos que para evitar el roce de la sandalia utilices solo la de la planta.
Sabemos que vamos a todas partes con prisas y que en verano es muy normal darte una ducha por ejemplo y salir con el pelo mojado. Vaaaale. Lo aceptamos. Pero si quieres evitar el roce de la sandalia tienes que secarte bien los pies. Esa humedad extra que aún queda en la piel favorece la aparición de rozaduras.
Y si te hemos dicho que te seques bien los pies (esperemos que nos hagas caso) también tienes que tener en cuenta que uno de los motivos por los que se suele formar ampollas y rozaduras en verano es el sudor. Así que a parte de secártelos, échate polvos de talco sobre la planta del pie, en el empeine y entre los dedos cada cierto tiempo.
¿Cuál es la parte que crees que más te va a doler de la sandalia? Eso es lo primero que tienes que preguntarte antes de aplicar la vaselina en tu cangrejera. Lo mejor es que pongas la vaselina por la noche, porque así cuando te las pongas ya se habrá impregnado y te las podrás poner tranquilamente por la mañana.
Si la dureza es muy gruesa, tienes que limarla cada cuatro o cinco días. Mejor, al salir de la ducha, con la ayuda de una lima de pedicura, suavemente y mediante movimientos circulares. Sabemos que es un rollo, pero es mejor que seas constante a que te pases un sólo día.
Hay una cosa muy guay que es un rodillo eléctrico y con unos 10 segundos te dejan supersuavito el pie. Pero volvemos a lo mismo, hay que intentar ser constante… 😉
Si puedes emplea cremas específicas anti rozaduras. En las farmacias las venden además de unos sprays especiales para ablandar los zapatos que es otra opción. (Echa el spray en una zona oculta del zapato por si deja alguna mancha)
También es muy bueno para los pies una exfoliación tras un baño caliente de 20 minutos hasta 3 veces por semana para que la piel se mantenga elástica y a prueba de durezas. A nosotros nos parece perfecto lo de la exfoliación pero como nos preocupa el planeta ya sabes que no estamos muy a favor de tanto baño.
Lo que nunca pasa de moda es la crema Nivea. Nuestras abuelas de toda la vida de Dios le ponían por el interior de la sandalia cubriendo bien las tiras en el interior. Y si ya te has hecho la herida porque has leído este post muy tarde, hay cremas cicatrizantes que te ayudaran a recuperar el pie tipo Cicalfate de Avène, Cicaplast de La Roche-Posay o Cicabio de Bioderma. Y hay algo que hace magia y es natural: El aloe Vera.
Hay unos apósitos queratolíticos o “callicidas” que seguro has escuchado hablar. Y hay algunos que son peligrosillos porque actúan mediante agentes químicos, como el ácido salicílico. Esto lo que te hace es una quemadura que no siempre se circunscribe al propio callo y acaba produciendo más dolor que la propia lesión. En los casos más chungos, puede llegar a destruir la epidermis, la dermis y alcanzar al tejido graso, incluso, al hueso.
Si de todas formas eres intrépido y te has visto el típico vídeo de Youtube que te explica cómo hacertelo en casa y te has destrozado el pie, hay solución (aunque mejor no lo hagas en casa): Sumergir el pie en un baño de agua con bicarbonato para neutralizar el efecto del ácido.
Cuanto más hidratado esté el pie más elástica será la piel y mejor resistirá el roce con la sandalia. Aplica la crema hidratante específica para el pie, masajeando hasta que penetre del todo. ¿Y qué harías justo después? ¿Ponerte un calcetín? Pues no, porque una parte importante del producto irá a parar al tejido de esa prenda.
Lo ideal es que si tienes una zona con una gran dureza, por ejemplo, el talón, que te eches la hidratante y después la cubras con un film transparente de cocina. En dos o tres días se te habrá quitado muchísimo la sequedad.
Lo de prevenir mejor que curar nos gusta mucho la verdad. Acuérdate de la última rozadura que te hiciste con tus sandalias. Así que algo de toda la vida es ponerte esparadrapo en los lugares exactos en los que sabes que el roce acabará convirtiéndose en herida. Pero como el mundo ha evolucionado… ¡Mejor una tirita transparente! ¡Ah! Y también funcionan muy bien los apósitos de hidrogel. 🙂
No te vamos a engañar. Nuestras sandalias son transparentes, y son divinas pero… ¡Se transparentan las uñas! Así que está estupendo esto de evitar el roce de las sandalias, pero ya que te pones a mimarte el pie lo suyo es que te dejes el pie de museo.
Si vas a un local de pedicura te van a quitar las durezas y callosidades con herramientas específicas y no son demasiado abrasivas. Luego te pondrán una mascarilla superhidratante para tratar la piel en profundidad. Y si el sitio es muy “pro” no solo te la pondrán en el pie, también en las pantorrillas. Y por supuesto si luego te pintas las uñas estarás estupenda.
Vamos a pensar que te has puesto cremita, que te cuidas, pero que aún así quieres que las cangrejeras transparentes te queden perfectas. Pues bien, estos son remedios un poco de la abuela, pero bueno, si se llevan haciendo tantos años… Por algo será. 🙂
Otro truco que tiene bastantes años de antigüedad consiste en congelar. Lo que tienes que hacer es llenar una bolsa de congelar alimentos con agua hasta la mitad, ahí metes tus cangrejeras y lo metes en el congelador. También dicen que se pueden meter las sandalias con papel de periódico sin humedecer y dejar allí las cangrejeras dos o tres días.
¿Cómo aparecerán tus sandalias transparentes? ¿Serán las sandalias perfectas para Frozen? Pues al congelarse el agua, la bolsa aumentará de tamaño y dará de sí las sandalias. Lo más importante es que aunque te mueras de frío, ponte las sandalias en cuanto las saques para que se adapten a la forma de tus pies.
Otro truco para ensanchar las sandalias y hacer que se amolden a la forma de tus pies es impregnar unas hojas del papel periódico con alcohol, para ponerlo justo en la parte de las sandalias que más te duelen. Déjalo un par de horas y luego quita el periódico. Y luego como con el método de congelar las sandalias ponte las cangrejeras en casa para que se adapten a tu forma y no te salgan ampollas en los pies.
Simplemente tienes que coger una cuchara y pasar la parte posterior por las tiras, los talones o cualquier parte que pueda rozarte el pie. Pero eso sí, la clave para que este truco funcione es que pases la cuchara con fuerza. Dale con ganas y esto hará que se te quede un pelín más holgada.
Si ves que las sandalias transparentes tienen un material demasiado duro y molesta a tus lindos pies, puedes intentar hacerlos más flexibles. De todas formas, creemos que no te hará falta porque son bastante suavitas. Pero lo que puedes hacer es aplicarles calor en las zonas donde más te duelen, ¡verás lo flexibles que se vuelven! Déjate las cangrejeras puestas hasta que se enfríen del todo.
Para evitar el roce de las sandalias hay algo muy obvio, pero lo pongo por aquí por si acaso a alguien no se le ocurre… Pero es obvio que salir a bailar o dar un paseo por la ciudad no es el mejor momento para estrenar tus sandalias nuevas. Lo ideal es que te las pongas para ir a la oficina si vas en metro, o para el trabajo si te pasas mucho rato sentada. O a unas malas practica en casa por el pasillo.
Otra opción es que te pongas tus sandalias transparentes un día, y luego al día siguiente te pongas un calzado que sabes que no te hace daño. Si lo combinas, tus pies tendrán un respiro y así es muy difícil que te vayas a hacer unas heridas profundas.
No has podido evitar el roce de la sandalias y unas dolorosas heridas/ ampollas adornan tus pies después de ponerte tus cangrejeras nuevas. Buenoooo no nos has hecho caso pero te vamos a ayudar. Lava la zona con agua templada y jabón para desinfectarla, lo último que queremos es que el daño sea aún mayor. Hierbas como el tomillo o el romero son desinfectantes naturales así que prepara la mezcla hirviéndolos con agua y aplica el resultado sobre la zona. La manzanilla también alivia.
Otra alternativa es el agua con sal. Es molesto, lo sabemos, pero piensa en que te va a curar. En el caso de las ampollas, ni se te ocurra explotarlas ya que el mal puede ser aún mayor. Si el líquido no se reabsorbe puedes desinfectar una aguja y pinchar la piel con mucho cuidado para que éste salga y así disminuir la hinchazón de la zona. Aplica yodo o algún otro producto desinfectante después. Y si ves que la cosa no mejora ve al médico o a la farmacia y ponte lo que te recomienden.