POTES es un pueblo pequeñito de Cantabria y cada año el segundo fin de semana de noviembre celebra la fiesta del Orujo que ha sido declarada de interés turístico nacional.
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Los lebaniegos llevan haciendo orujo desde nada menos que la Edad Media. Y es que su pueblo tiene un microclima que lo hacen perfecto para la vid y, por lo tanto, para el orujo. Este aguardiente servía para cambiarlo por otras cosas incluso para pagar impuestos. Así que hablemos primero del protagonista de la fiesta.
Cuándo es | Segundo fin de semana de noviembre |
Dónde comer | Restaurante Los Camachos |
Qué no puedes olvidar | Una huevera |
UN VISTAZO RÁPIDO
El orujo se hace a partir de hollejos, raspones y pepitas que quedan tras pisar las uvas con las que se obtiene el mosto y posteriormente el vino. La primera vez que se celebró la fiesta del orujo fue en 1984 gracias al esfuerzo de lebaniegos anónimos que querían conservar sus tradiciones. Sin embargo, en 1986 hubo una nueva legislación que prohibió la destilación casera con alquitaras móviles, por lo que la fiesta dejó de celebrarse entre 1985 y 1993.
Y a partir de 1994 se obtuvo un permiso para poder hacer la fiesta del orujo… ¡Viva la vid, viva el orujo y viva Potes!
Si te estás preguntando qué día es la fiesta del orujo te vamos a dar una alegría: Es el segundo fin de semana de noviembre. ¡No es sólo un día! Esta es la buena noticia… Y hará frío seguro. ¡Claro! Para eso estamos en Cantabria… Pero nada que no caliente un buen orujo de Potes. Por cierto, ya que estás por el norte te aconsejamos visitar Euskadi. ¿Sabes que en GAZTELUGATXE se ha grabado escenas de Juegos de tronos?
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Nosotros pensábamos que la fiesta del orujo se hacía sólo el sábado, no nos preguntéis por qué, pero era así. Ni el viernes ni el domingo. Aunque nosotros si fuéramos tú y sólo pudieras ir un día, iríamos el sábado. Y además como estamos en el norte, ya sabéis que aunque llueva, nada se suspende.
Los niños también tiene cabida en esta fiesta, y no solo podrán jugar como antiguamente este día, si no que el domingo pueden participar también en un taller de cocina infantil. Esto se ha hecho este año, pero siempre hay alguna novedad en la guía de las fiestas.
Por la tarde hay un desfile de grupos folclóricos llenos de color que alegran el pueblo. Van tocando música y desfilando desde el principio del pueblo hasta la carpa donde se va a proclamara el orujero mayor.
Se elije cada año, y es la persona encargada de leer el pregón y dar comienzo a las fiestas. Han sido orujeros mayores Carmen Sevilla, David Bustamante, Eduardo Noriega, Carlos Herrera… Y este año nosotros pudimos ver al ex seleccionador de España, Vicente del Bosque. Sí, el que consiguió el Mundial en 2010 y la Eurocopa en 2012.
Es algo simbólico. En la carpa del pueblo hay una alquitara (donde se hace el orujo), y el orujero mayor de ese año es el que tiene el honor de dar salida a la fiesta encendiendo la alquitara el sábado. El domingo, también se vuelve a encender la alquitara por la mañana para recordar que la fiesta continúa.
En la carpa, hay nueve stands, y cada uno representa a cada una de las empresas que producen orujo en Potes. Mientras se escucha actuaciones folclóricas, la gente va a unos kioskos que hay fuera de la carpa y compra tikets. Cada tiket cuesta un euro y equivale a tres chupitos en el stand que cada uno quiera. Cuando llega la noche, además en el escenario el jurado hace la cata de los orujos blancos de las fábricas para elegir el mejor del año.
Es un momento muy emocionante porque todas las empresas llevan trabajando todo el año para tener el orgullo de este premio. Es el certificado de calidad del mejor orujo levaniego. Este premio es fruto de la deliberación de la noche anterior por parte de los miembros del jurado.
Tenemos claro que hemos venido a la fiesta del orujo, pero es que Potes no es un pueblo normal. Es un pueblo bonito en el que seguramente no pararás de hacerte fotos en INSTAGRAM como nosotros y al que recomendarás ir a tus amigos o familia.
Sin duda tenéis que aprovechéis para ver hacer turismo antes de ir a la fiesta del orujo. Potes es un pueblo precioso, de calles empedradas y casas con vigas de madera. Está super limpio y sentirás que estás en el escenario de una película de Disney. De hecho, podrían haber rodado aquí perfectamente “La Bella y la Bestia”. Por supuesto, no dejéis de visitar la Torre del Infantado porque, además de tener exposiciones todo el año, sin duda tiene las mejores vistas de la ciudad.
También puedes ir al corazón de los Picos de Europa, a FUENTE DÉ Y MONTAR EN SU TELEFÉRICO. Y en sólo 4 minutos pasas de 753 metros a 1823. ¿Qué te parece? Y por supuesto imagínate qué vistas se tienen desde allí… 🙂
Todo el mundo está super feliz por la calle y abierto a hablar con cualquiera. Así, descubrimos que se bebe un vino que se llama tostadillo que es un vino dulce y entra muy bien a la hora del aperitivo. También descubrimos lo simpáticas que son las mujeres de Liébana y lo bonitos que son sus trajes regionales.
Un momento, antes de ir a comer tendrás que ir a sacar dinero. Y menudo rollo tener que buscar tu cajero. A nosotros no nos pasa porque tenemos la TARJETA BNEXT que no nos cobra comisión en ningún cajero y si te la pides a través de ESTE ENLACE es gratis. ¡Así que aprovecha! Nosotros la utilizamos tanto en España como cuando viajamos.
Hay que comer sí o sí el delicioso cocido lebaniego. Primero se come la sopa que está buenísima y sabe a garbanzos. Luego se comen garbanzos pequeñitos de la zona de Potes, repollo, tocino, chorizo, morcilla, relleno (una masa hecha con miga de pan, huevo, chorizo y perejil) y costilla no vaya a ser que pasemos hambre.
Por supuesto, es plato único (faltaría más). Nosotros, además, tomamos un tostadillo con quesuco de la tierra y rabas mientras esperábamos para sentarnos a comer, así que imagina cómo acabamos después del cocido lebaniego… ¡y el postre! Por cierto, comimos en el mítico restaurante LOS CAMACHOS.
Y si piensas que el postre era ligerito… pues no hace falta ni decir que es justo todo lo contrario, pero estaba tan bueno que estuvimos a punto de comernos ¡hasta la cerámica del plato! El flan está hecho con orujo y café. Está un poco fuerte, pero el sabor es muy rico y peculiar. La quesada estaba esponjosa y era la dosis perfecta si no hubiéramos comido todo lo anterior, claro…
Hay gente que piensa que hay dos estómagos. Uno para salado y otro para dulce. ¿Piensas tú también así? Nosotros no sabemos decirte, porque hay veces que estamos llenos llenísimos y no nos entra nada más… Pero si te coincide el “ya que estoy aquí lo tendré que probar” y el “si voy a beber orujo tendré que comer bien”, pues vas y te comes dos postres. 😉
Es una comida muy curiosa (Esto es para hacerlo antes del postre). El borono es como una especie de morcilla (hecha con sangre de cerdo, cebolla y especias) y se comen con manzanas asadas. Se hace así de gordo, tal como lo ves en la imagen, pero luego te lo dan en rodajitas porque o si no sería imposible de comer.
Por supuesto tenéis que probar el orujo, y a quién no le guste, que pruebe la crema de orujo. Pero hay una bebida que no es tan conocida, que está buenísima y que además es muy buena para la digestión: el té del puerto. Es una infusión de hierbas silvestres que se cogen en el monte de Potes y se le echa un chorrito de orujo. Ojo que es un sabor fuerte.
A nosotros nos pasó que estábamos en una plaza tranquilamente sentados en un banco y aparecieron dos hombres vestidos de pastor de la época, incluida mochila hecha con un cabrito. Además, uno de ellos hacía música con una caracola. Desde luego, nos trasladaron a otra época y el concierto empezó de manera espontánea.
Fíjate sobre todo en los detalles porque es un pueblo al que le encanta decorar con flores ¡y están en cualquier esquina! Los balcones, las ventanas, las calles… todo tiene muchísimo color. Nosotros sólo hemos ido para la fiesta del orujo pero tiene que ser realmente bonito en primavera, así que apúntatelo para otra escapada.
Podrás pensar que es raro (¡y lo es!), pero no puedes ir a la Fiesta del Orujo sin una huevera. Vas a tener que hacer cola para probar los distintos tipos de orujos que preparan todas las pequeñas empresas del pueblo. Se entiende en general, pero más aún si sabes que se compran tickets de un euro que se canjean ¡¡¡por tres chupitos!!! Como hay que esperar para que te sirvan, querrás pedir varios chupitos cada vez. Si no llevas una huevera para portarlos, será el suelo quien se los beba…
Por supuesto, disfruta a tope de la fiesta y del orujo, pero con moderación porque a partir del séptimo lo más probable es que tengas que echarte a dormir.
8 Comments
¿Sabéis qué? Tengo muchas ganas de conocer Cantabria, es la única comunidad que me falta por explorar y hace poquito iba a ir pero por diferentes motivos tuve que cancelarlo con los billetes comprados 🙁 El destino es sabio, tengo que incluir Potes en mi ruta!!
Gracias por compartir! Ah!! Y esas migas tienen una pinta de muerteeeee 😀
Claaaaro… ¡El destino es que tienes que ir con nosotros a la fiesta del orujo el año que viene!! Oleeeee
Uff madre mía qué hambre con esa rica quesada ? vi vuestro vídeo y me gustó mucho, qué bonito Potes, su fiesta y lo bien que se come ¡el año que viene me apunto esa fiesta!
¡Venga! El año que viene vamos juntos. ¡Yuhuuuuuu!
Me ha encantado la “Huevera Profesional” que se han montao para llevar los chupitos. Nos apuntamos Potes y esta fiesta para cuando vayamos por Cantabria 😉
¡Nosotros el año que viene nos llevamos la huevera seguro! 🙂
Paraíso rodeado de naturaleza donde se come muy bien, se disfruta de buen clima,tranquilidad y buena gente
¡Pues te damos toda la razón Margarita! 🙂